aviacion en la revolucion de asturias 1934

Diego Farpón. LQS. Octubre 2020

Tras los primeros combates de la Revolución de Octubre el Comité Innovador de Mieres tiene un inconveniente para solucionar: no posee suficientes municiones ni armas para abastecer al Ejército Colorado.

Llegada de Legionarios y también comienzo de la opresión

En la Comarca de la Felguera se llegó a poner en práctica una genuina industria de guerra. Mientras que, el Gobierno tomó la resolución de llamar a un conjunto de en general entre aquéllos que estaban un tal Yagüe, Godet y Franco (22), para sofocar la revolución de Asturias. Todos con experiencia a sus espaldas, fundamentada en opresión de huelgas, y con la meta de que actuasen como jefes del Estado Mayor y dirigieran la opresión contra la insurrección asturiana.

Franco, popular ahora como militar africanista, solicitó el envío de tropas de la Legión desplegadas en el norte de África para achicar a los mineros. Así comenzaban a desembarcar en los puertos asturianos entidades de la legión para respaldar a los pocos 1500 regulares (23) que en el instante de la insurrección asturiana estaban con base en Asturias. Este suceso provocó que los revolucionarios debiesen dividir sus fuerzas para llevar a cabo en oposición al riesgo militar. La presión frente a los militares fue contenida en el Sur y en el Este.

85 años pasaron desde el instante en que se causó la mayor insurrección revolucionaria en la II República De españa, aquella promovida por socialistas y apoyada por otros anarcosindicalistas y marxistas.

Protagonizado en la mayoría de los casos por mineros, mucho más de 80 años después este ámbito no dejó de verse como entre los mucho más combativos. Es suficiente con ver la contestación que han realizado frente a los permanentes proyectos de reconversión en los últimos tiempos.

No obstante esta insurrección fue bastante alén de reclamaciones para actualizaciones laborales y sociales, sino se proponía y ponía en práctica el ejercicio del comunismo libertario. Y sucede que de ningún modo posiblemente nuestra memoria histórica deje pasar un hecho como la insurrección asturiana, en tanto que fue lo que la Comuna de París había sido un siglo antes, pero su ejercicio hace entender ese espíritu toro y de pelea directa siempre y en todo momento persistente entre asturas de antes y en este momento.

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